La diverticulitis en perrosLa diverticulitis en perros

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La diverticulitis es un trastorno del tracto digestivo relativamente común entre las personas, pero también puede afectar a los perros. Causa la formación de pequeñas bolsas, llamadas divertículos, que generalmente afectan al intestino grueso en lugar del pequeño, pero que aún pueden estar presentes en ambos.

 

La diverticulitis en sí misma, y el estallido de la afección, ocurre cuando los divertículos se inflaman. La afección puede volverse crónica, es decir, establecerse como una afección permanente, que tenderá a alternar entre períodos de crisis y períodos de plena salud en el perro, pero que puede sufrir problemas relacionados.

Las divertículas también se pueden descomponer, lo que resulta en dolor abdominal que puede ser leve o particularmente intenso. Por lo general, el área más comúnmente afectada es el lado izquierdo de la pared intestinal, por esta razón un dolor en el lado izquierdo es un síntoma muy común.

Si su perro tiene un estómago particularmente sensible o está experimentando períodos dolorosos en el área abdominal, la diverticulitis puede ser un diagnóstico probable que su veterinario hará. En este artículo aprenderemos más sobre la funticulitis en el perro, incluyendo síntomas, tratamiento y control de enfermedades.

¿Cuándo se produce diverticolita en perros?

La diverticolita en el perro ocurre cuando las heces en el intestino no se eliminan correctamente, al igual que puede ocurrir en perros que tienden a sufrir estreñimiento. Esto lleva a una acumulación de materia fecal que debe soportar el colon, resultando en áreas dolorosas que formarán las divertículas, o bolsas, que corren el riesgo de infectarse o romperse.

Esto causa un dolor comprensible y molestias para el perro, que pueden ser más o menos intensamente afectados. Si no se trata, la diverticulitis puede llevar a una serie de complicaciones potencialmente graves, incluyendo perforaciones intestinales, infecciones y sangrado intestinal, visibles a través de las heces.

Las divertículas también pueden provocar fístulas, que ocurren cuando dos divertículos se pegan o fusionan. Los síntomas de la diverticulitis en perros se presenta con síntomas muy similares a la colitis canina, una de las primeras afecciones que el veterinario deberá descartar.

Los síntomas principales de la enfermedad incluyen: Calambres; Dolor abdominal, particularmente en el lado izquierdo; Dilatación abdominal; Espasmos abdominales; Fiebre o escalofríos, náuseas y potencialmente vómitos; Diarrea. El dolor en el área abdominal, generalmente en el lado izquierdo, a menudo puede llevar a hinchazón y calambres que causan espasmos.

La diverticulitis genera en el perro una mayor necesidad de ir intestino mientras que las heces aparecerán más bien líquidas y acuosas, con sangre. La infección de las divertículas puede llevar a síntomas como fiebre alta o un cambio en la temperatura corporal que causa escalofríos. Sin embargo, todos estos síntomas también pueden indicar otros trastornos gastrointestinales, incluyendo colitis e infecciones intestinales, el veterinario debe excluir todas las probabilidades antes de hacer un diagnóstico definitivo.

¿Cuáles son las causas de diverticulitis en perros?

En general, la diverticulitis, tanto en perros como en personas, se debe a una dieta pobre en fibras vegetales. Los períodos frecuentes de estreñimiento también pueden ocasionar esto, debido a la acumulación de materia fecal en el colon. No es una condición hereditaria, ni hay una predisposición particular en una raza más que en otra. La diverticulitis común en perros se trata con antibióticos orales y una dieta rica en fibra.

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